Terra: empresa aragonesa pionera en anticontaminación

 

 

Si hay algo difícil de manejar son las manchas de petróleo crudo: por más que quitemos y limpiemos siempre parece que queden restos. A esta dificultad contaminante del crudo debemos añadir la dificultad del “mar.” Y sabiendo como es la cornisa cantábrica con su mar, va ha ser muy difícil limpiar eso.

 


No deseamos entrar en polémicas de si se actúa mal o bien, una catástrofe de estas características siempre trae polémica. Lo que sí deseamos destacar es que Aragón, una comunidad sin contacto con el mar, ofrece soluciones a problemas de limpieza o ecología.

 


Destacaría que para manejar un producto tan difícil como es el petróleo crudo, hay que disponer de una tecnología puntera. Es significativo el riesgo que han corrido unos empresarios para dar remedio a soluciones a problemas externos al lugar de producción.

Para mi, enterarme de que Aragón cuente con una empresa como “Terra” ha supuesto una sorpresa y un ejercicio de imaginación. Me he puesto a buscar información sobre la empresa en Internet y lo que visto me gustado aunque no soy un experto en dichos temas industriales, solo soy un ciudadano preocupado por la calidad de vida.

Qué es Terra

Terra es una sociedad limitada, con razón social en un Polígono de San Matero de Gallego. Fundada en 1994 surgió con el ideal de satisfacer el progresivo aumento y demanda de productos absorbentes en la industria nacional e internacional. Es la única empresa española especializada en el perfeccionamiento, fabricación y comercialización de equipos para la lucha contra la contaminación por derrames de líquidos: químicos, hidrocarburos y otros productos altamente peligrosos Por desgracia, dichos derrames están en boca de todos durante las últimas semanas.

 


Cuenta con infraestructura de producción y almacenes en Zaragoza, una plantilla de 13 personas con alto nivel de cualificación, entre directivos, técnicos, administrativos y operarios y una importante aceptación entre empresas petrolíferas europeas.

 


Tiene una íntegra gama de productos: Absorbentes Industriales, equipos para la contención de derrames de hidrocarburos en mar, tales como barreras anticontaminación, skimmers y bombas para recuperar vertidos de hidrocarburos o barcos anticontaminación, entre otros. Carreteles de accionamiento manual e hidráulico, carretel móvil, centrales hidráulicas, contenedores y tanques. Continua ampliando sus conocimientos sobre productos y procesos de producción a través de una labor de investigación y desarrollo. “Las bases de la política y toma de decisiones comienza por ofrecer a todos los clientes soluciones prácticas y económicas para el control de la contaminación”.

 


Productos que han sido desarrollados íntimamente con el programa europeo EUREKA-EUROENVIRON, en cooperación con empresas extranjeras punteras del sector, y las empresas han contado con ayudas del Instituto Aragonés de Fomento a través de CEEIARAGON y del Ministerio de Ciencia y Tecnología, mediante el Programa Tecnológico Medioambiental PITMA.
TERRA fue ganadora del concurso IDEA 93 de la Comunidad Europea de ese mismo año.

 

Las empresas de recuperación ecológica

Empresas como Terra crecerán en el futuro a la vez que surgirán otras nuevas. Desastres como el “Prestige” hacen ver a todo el mundo los problemas a solucionar, no podemos quedarnos con las manos cruzadas viendo como se destruye la naturaleza y desaparecen puestos de trabajo ya que no se podrá pescar durante no se sabe cuántos años. Aquí hay tarea para unos años de limpieza.

 


Terra, será ahora una empresa pequeña pero tiene por delante un buen futuro, y su plantilla de puestos de trabajo aumentará, necesitará más personal y también nuevas ideas. Que Aragón cuente con ella es positivo de cara a una creación de empleo. No de trabajo temporal y para casos puntuales como la catástrofe “Prestige”, sino grupos de profesionales que como “los bomberos” o “policías” estén al servicio de la sociedad y la naturaleza. No por que lo vea en una bola de cristal, sino por simple sentido común.

 


El “Prestige” ha abierto los ojos a los ciudadanos y después de tres desastres de este tipo, los políticos van ha tener que dar soluciones al respecto. Desde la sociedad española deben surgir nuevos trabajos, técnicos y nuevos nidos económicos donde el empresario pueda invertir. Y entre todos garantizar una buena calidad medioambiental.

 


No se puede dejar que el mar Cantábrico sea un basurero, que nuestras playas se vean convertidas en cementerios. Eso es un trabajo, pero es una tarea de todos aunque estemos como esta empresa “en tierra adentro”, como dice una canción.