La consejera de Economía, Innovación y Empleo, Carmen Herrarte, ha firmado con las entidades sociales ADUNARE y Fundación Picarral dos convenios para favorecer la inclusión y la mejora de la empleabilidad de las personas que están en riesgo de exclusión. El Ayuntamiento de Zaragoza aportará entre los dos acuerdos 585.000 euros, 475.000 euros irán destinados a los proyectos de la asociación ADUNARE, y 110.000 euros para la Fundación Picarral.
Durante la firma, la consejera Carmen Herrarte ha dicho: “el acceso a la educación es imprescindible para que la igualdad de oportunidades sea real. Los sistemas académicos clásicos en ocasiones son muy rígidos y dejan a muchas personas por el camino. La labor de adaptación de la formación a las necesidades de los alumnos que realizan los centros sociolaborales es importantísima. Esperemos que llegue el día en el que el trabajo que realizan los alumnos en los centros sociolaborales tenga un reconocimiento curricular mayor“.
CONVENIO CON ADUNARE
El Ayuntamiento aporta a ADUNARE 475.000 euros de subvención para potenciar el “Proyecto de promoción de la inclusión sociolaboral para colectivos en situación de vulnerabilidad o exclusión” durante este año 2019. A través de los fondos, la fundación promueve mejorar la empleabilidad de las personas del Barrio Oliver que en los últimos años han tenido dificultades para incorporarse al mercado de trabajo.
Para conseguir ese objetivo, la asociación plantea prácticas formativas en áreas de construcción y jardinería, desarrollo de competencias básicas y desarrollo comunitario, y mejora de la empleabilidad con talleres impulsados a través de los servicios de orientación laboral de la Agencia de colocación de Fundación ADUNARE.
FUNDACIÓN PICARRAL
En este caso, el consistorio proporciona a la Fundación Picarral 110.000 euros de subvención. Los objetivos del programa de esta entidad pasan por facilitar a las personas participantes herramientas, técnicas, formación y experiencias que les permitan insertarse en el mercado laboral. También apuesta por ofrecer acciones formativas teórico-prácticas que atiendan a sus necesidades y desarrollar un programa de acompañamiento que incluya acciones de apoyo de convivencia y redes sociales, así como un recurso residencial temporal y asistido.
La Fundación Picarral trabaja ese acompañamiento a través de la empresa de inserción MAPISER y el Centro de Formación Laboral e Inserción Social-SERPI. Para establecer cómo se camina junto a los participantes, los impulsores del programa tienen en cuenta las características de cada persona, sus particularidades y el tejido productivo en el que se enmarca.